Independientemente de la zona climática dónde estén instalados los paneles solares, suelen estar sometidos a condiciones climáticas severas, por ello, es importante mantener los paneles solares en buenas condiciones para que no pierdan eficiencia.
No es necesario que la limpieza se realice con regularidad, ya que la mayoría de las veces, el agua de lluvia es lo único que necesita limpieza. En cualquier caso, si vive en un lugar donde existen las condiciones anteriores, no está mal rociar con agua los paneles fotovoltaicos de vez en cuando. A continuación, responderemos preguntas básicas de nuestros clientes con instalaciones de uso propio sobre su protección:
¿Qué productos de limpieza debo usar para limpiar los paneles solares?
La característica básica que debemos tener en cuenta a la hora de limpiar los paneles solares es no rayar ni dañar el cristal, ya que si esto ocurre, se reducirá la producción de energía de los paneles dañados. La forma más adecuada es:
Un posible inconveniente si la vivienda está situada cerca de una vía por la que transitan vehículos pesados con frecuencia o cerca de un aeropuerto es la presencia de residuos oleosos en los paneles. Con una pequeña cantidad de alcohol isopropílico y un paño, su retirada será cómoda y sencilla. Asimismo, se desaconsejan los productos de limpieza agresivos que pueden dañar o rayar el vidrio.
¿Es necesario pagar por una asistencia de limpieza de placas solares?
Si la instalación se encuentra en un lugar de difícil acceso, como un techo o azotea, por razones fundamentales de seguridad, lo ideal sería contratar a un profesional para que lo asista. Los profesionales de los auxiliares de limpieza disponen de los medios adecuados para realizar esta tarea.
Si los paneles fotovoltaicos se instalan encima del pavimento, puede ser más beneficioso que realice usted mismo esta tarea, siempre teniendo en cuenta de no utilizar productos corrosivos.
¿Se debe quitar la nieve de los paneles solares?
Generalmente, no es necesario retirar la nieve de los paneles solares, ya que ella misma por su propio peso suelen derretirse y desaparecer. Además, las instalaciones de paneles solares mayoritariamente se encuentran en pendiente en un determinado ángulo y, gracias a la gravedad, cuando se derrite, desaparece.